¿Cómo pueden ayudar los programas de compliance a desarrollar el propósito de una organización?

Lorena Cobiella & Michael Fawlk

Las empresas, cualquiera que sea su tamaño, ven los beneficios de poner en marcha programas de cumplimiento (Compliance), no sólo para cumplir con sus obligaciones legales y regulatorias, sino también como un medio para lograr sus objetivos de negocio y desarrollar su estrategia en línea con los valores y la cultura de la compañía.

Algunos estudios demuestran que, en general, los consumidores prefieren empresas que se muevan por su propósito (purpose-driven), con ello nos referimos a empresas que tienen un fuerte compromiso con temas serios que importan a los consumidores, como puede ser la protección de la salud o del medioambiente, los derechos humanos o la sostenibilidad. Vemos una evolución desde la posición de Milton Friedman quien sostenía que la responsabilidad social de las empresas consiste en incrementar sus beneficios, a la tendencia actual que apoya la idea de que las empresas pueden obtener beneficios haciendo las cosas bien (doing well while doing good), esta tendencia hace eco en los consumidores y los empleados quienes prefieren empresas que obtienen beneficios y a la vez aportan valor a la sociedad.

Las empresas que se mueven por su propósito al mismo tiempo definen su esencia, su cultura y sus valores y los comparten internamente con sus empleados y externamente con stakeholders y consumidores. Es crucial que los órganos de gobierno y la dirección de estas empresas estén comprometidos con una cultura de hacer las cosas bien. Es en este punto donde un programa efectivo de Ethics & Compliance entra en juego, como motor para desarrollar el propósito de la organización. La integridad y la ética como parte de la estrategia de hacer negocios lleva la organización a operar con honestidad y en línea con sus valores éticos, y como no puede ser de otra manera, en cumplimiento de la legislación aplicable.

Un programa de Ethics & Compliance sólido que refleje el propósito, los valores y la cultura de una empresa mejora su credibilidad y la confianza de los stakeholders y de los empleados y, al mismo tiempo, contribuye a que el propósito de estas empresas sea un factor determinante en su rendimiento empresarial y mejore sus resultados. Los equipos de dirección tienes un importante papel que jugar: deben liderar con su ejemplo y asegurarse que Ethics & Compliance sea parte del día a día del negocio de la empresa.